Isabel Plant, Concepción Quintana, Fernanda Claro y Sofía García-Huidobro son los rostros detrás del éxito de “Mujeres Bacanas”, plataforma que partió como un blog donde cuatro amigas periodistas destacaban cada día a mujeres emblemáticas, sin imaginar que cinco años después el proyecto ya se habría consolidado en la web, en formato podcast, en redes sociales con más de 200 mil seguidores (instagram) y con tres libros bajo el brazo (“Mujeres Bacanas”, “Mujeres Bacanas Latinas” y “Ágata y las pintoras”), entre otros logros.
¿Qué inspiró la creación de Mujeres Bacanas?
La idea original partió de una de mis compañeras, Isabel Plant. A ella le venía dando vueltas en la cabeza hacer algo con feminismo y dándole distintas vueltas se nos ocurrió este ejercicio de visibilización donde ella nos propuso unirnos a su idea e inmediatamente nos embarcamos.
Y ese sentido ¿qué significa ser una Mujer Bacana?
Creemos que tiene que ver mucho con la energía, la fortaleza. No son mujeres perfectas porque no existen. Son mujeres que pueden tener luces y sombras, que pueden haber cometido errores, pero que por sobre todas las cosas han perseguido una idea, han querido forjar una identidad propia. El proyecto tiene que ver totalmente con la importancia de los referentes y como dicen nuestros logos “si ella pudieron, nosotras también” o “si puedes verlo, puedes serlo”, nos gustaría que las mujeres que no sigan en nuestras distintas redes sociales de alguna manera se sientan inspiradas por las historias que nosotras publicamos diariamente para perseguir su sueño.
Respecto a los libros publicados ¿cómo fue el proceso de selección de cada personaje?
Fue difícil hacer esta selección de sólo 100 mujeres pero tratamos que fuera lo más representativo posible y que incluyera artistas, deportistas, intelectuales, activistas y personas de distintos ámbitos. Buscamos integrar mujeres históricas que marcaron la pauta y también a mujeres contemporáneas en las cuales nos podemos ver reflejadas. Ese fue un desafío grande porque nos dimos cuenta que la mayoría de nuestros referentes eran de Estados Unidos, Europa y un par por ahí de Latinoamérica pero de Asia y África no sabíamos nada y bueno, obviamente siempre uno se la tiene que jugar cuando hace una selección. Era importante además por razones editoriales que hubiese rostros y nombres súper reconocibles y otros más nuevos, así que fue un mix de todo eso. Igual nos quedamos con esa sensación de que había todo un mundo de mujeres latinoamericanas que no habíamos alcanzado a visibilizar, así que quisimos hacernos cargo de alguna manera publicando esta segunda selección de 60 mujeres, donde muchas de ellas lucharon por la independencia de sus respectivos países, pero no son reconocidas por los libros de historia.
¿De qué forma se sintieron con el éxito de los libros y cómo fue la recepción por parte de los hombres?
Ha sido súper grato, nosotras hemos tenido una experiencia muy positiva y la recepción del libro fue una maravillosa sorpresa porque además llegaban hombres que querían comprarlo para regalárselo a su mamás o a sus hijas y eso nos pareció súper emocionante. Ver que habían muchos papás que estaban preocupados de cómo educar a sus hijas para que se empoderen, se crean el cuento y se transformen en las mujeres bacanas que todas podemos ser fue muy inspirador, de repente nos comentaban en las redes sociales, que todas las noches en vez de leerle un cuento a las niñas, le leían la mujer del día, así que yo diría que tenemos la fortuna de ser un espacio que es bien positivo y personalmente y a nombre también de mi compañeras, creemos que la sociedad se tiene que construir entre todos, así que no hay un antagonismo en ese sentido a los hombres, sino que tienen que ser nuestros compañeros en la lucha y en el camino hacia la equidad y la igualdad de género.
De alguna manera ustedes también han abierto para otras el camino. ¿Qué ha significado empezar a desarrollar y a conocer estas mujeres que son referentes y que ustedes también sean un referente ahora?
Creemos que ha sido súper grato poder darse un minuto para conocer las historias de otras mujeres y también transmitirlas, como les decía si hay una niña que leyendo nuestro libro o leyendo nuestras redes sociales siente la inspiración, eso ya es un regalo. Para nosotras fue algo bastante espontáneo y que se dio de manera orgánica, nunca dimensionamos que estábamos de alguna manera construyendo una comunidad y es muy reconfortante ese granito de arena que uno puede aportar para construir una mejor sociedad.
¿Cuáles serían los mejores momentos que han tenido como equipo en estos cinco años?
Los lanzamientos de libros siempre son muy emocionantes. En el primer lanzamiento, no podíamos creer que estaban todos nuestros amigos, nuestras familias, además que tuvimos la posibilidad de convocar a unos presentadores increíbles, como la Fiscal Ximena Chong, la psicóloga Constanza Michelson o el escritor Francisco Ortega, así que fue entretenido y emocionante. En lo personal ha sido gratificante la experiencia de charlas. Cuando hemos ido a colegios muchas veces vulnerables, ves a los niños como escuchan y le brillan los ojitos, entonces entiendes que estas nuevas generaciones, están varios pasos más adelante en la comprensión de que una sociedad debe ser más igualitaria.
La experiencia en la cárcel de mujeres también fue importante porque nos hicieron regalos preciosos y una reclusa nos había dibujado la portada del libro. Fue muy bonito y emocionante y para nosotras como amigas compartir este proyecto de todas maneras es algo que nos ha fortalecido.
¿Qué cree que falta todavía por potenciar para que las mujeres puedan alcanzar más oportunidades en distintas áreas?
Si bien se ha avanzado, queda mucho todavía, y en temas básicos como la igualdad laboral, la brecha salarial y un montón de situaciones que hemos visto que han empeorado con la pandemia. Lamentablemente las mujeres hemos retrocedido varios años porque cuando se trata del cuidado del hogar, de los hijos y de los adultos mayores, el peso finalmente lo seguimos llevando nosotras ya que generalmente la mujer es la jefa del hogar. Creo que hay que seguir avanzando a una mayor concientización a nivel de sociedad y de representación también. Es un gran paso que ahora se vaya a elaborar una Constitución donde la mitad de las Constituyentes sean mujeres y eso va a ser algo inédito a nivel mundial. Así que yo creo que tratar siempre de mirar el vaso medio lleno, pero tener claro que falta mucho.
¿Y en esa línea, cuál sería el consejo para las mujeres de regiones, que tienen algún sueño pero quizás todavía no se atreven? ¿Cómo poder empoderarse desde ahí?
Creo hay tanto por hacer con el talento y el trabajo de gente de regiones que quizás también ahora mirando todo lo que ha pasado con la pandemia pueden haber distinta oportunidades, estos mismos encuentros que se están realizando de manera digital o los programas de capacitación online hace que todo esté más cerca. El llamado es a que no se auto limiten por factores geográficos o por sentir que las cosas sólo suceden en Santiago. Yo creo que hoy más que nunca los proyectos pueden funcionar y ahí hay que ponerle mucho esfuerzo y por supuesto perseverancia. Quizás también elegir referentes para construir un camino propio.
¿Qué proyectos tienen para este 2021?
Marzo ha sido demasiado intenso por ser el mes de la mujer, así que hemos estado con hartas charlas y con harta actividad. Acabamos de lanzar el libro “Ágata y las pintoras” y estamos trabajando también con distintos programas que tienen que ver con jóvenes, con charlas en colegios, con un programa de autoestima y también siempre tratando de aprovechar el máximo de tiempo que tenemos disponible, porque todas tenemos trabajo, y familia, así que el tiempo siempre se hace poco, pero todas estas cosas nos tienen bien entusiasmadas.
¿Algún último mensaje por entregar?
Desde ya dejamos invitados a todos quienes tengan propuestas, o nos quieran contar historias que conozcan, porque también es importante decir que la Mujer Bacana, no es sólo la que se gana un premio, sino que muchas veces pueden ser nuestras mamás o vecinas. Son increíbles todas las historias que tenemos cerca de mujeres que sacan adelante a su familia. También es importante dejar como mensaje la empatía, el respeto que tenemos que tener y la sororidad, porque si ha sido más difícil para nosotras y a veces cometemos el error de ser demasiado duras con nosotras mismas. Debemos tratar de unirnos, no juzgarnos tanto y tratar de querernos tal cual somos.