Por Javiera Caro Urbina, estudiante de Periodismo, Universidad de La Frontera.
El deporte más jugado y disfrutado por las personas alrededor del mundo es, sin duda alguna el fútbol y desde el domingo 20 de noviembre, ya se está disputando la competencia de selecciones más importante del globo, la Copa Mundial de Fútbol masculino en Qatar. Pero al alero del fútbol profesional, también está la categoría amateur, siendo ANFA una de las entidades más importantes que permite a los aficionados desarrollar sus sueños en la cancha.
Hasta ahora solo se ha hablado de los hitos masculinos de este deporte, pero ¿cómo viven las mujeres la práctica de esta especialidad?
Ya desde hace un par de años el fútbol femenino ha comenzado a tomar protagonismo, a pesar de que por mucho tiempo ha sido invisibilizado, con escaso apoyo económico y tratado con poca seriedad, y es que hemos vivido durante siglos separando lo percibido como masculino con lo femenino, asociando actitudes y actividades a los hombres y a las mujeres.
Según un informe de la FIFA, un 72% de las futbolistas chilenas son jugadoras amateur, cifra que el gobierno pretende descender con la ley de profesionalización del fútbol femenino, anunciada en marzo de este año y que entró en vigor el día 10 de octubre pasado. Entre otras cifras entregadas, se definió que sólo un 9% de los cuerpos técnicos es liderado por mujeres y ocho jugadoras afirmaron tener un contrato y salario estable.
Escarleth Ancalao, estudiante de Educación Física y jugadora de fútbol amateur sostiene que la visión acerca de la práctica ha cambiado en comparación a algunos años atrás. “Cuando era chica estaban muy marcados los estereotipos” agrega que “antes jugabas y te decían que eras hombre (…) se noto el cambio, ahora hay más competencias femeninas, ya sea en futsal, fútbol, fútbol 7”, planteó.
Ascenso de popularidad
Es difícil negar que la creciente popularidad del fútbol femenino profesional ha tenido un gran impacto en la manera en que el público observa esta práctica. Desde la Copa América que tuvo sede en Chile el año 2018 y que le permitió su primera clasificación a un mundial adulto y el protagonismo de la alabada arquera Christiane Endler, cada vez más se habla del tema.
Frente a eso, Escarleth considera que un aspecto importante para potenciar la popularidad y visibilización, es el rol que tienen los medios de comunicación. “Siempre están los equipos masculinos, es muy raro escuchar las tablas de posiciones de algún equipo femenino o algún campeonato” y agrega que “por ahí deben empezar” para que exista un mayor interés y conciencia por parte del público.
No son pocas las personas que proporcionan una importante parte de su tiempo en las prácticas y campeonatos. Estas instancias, significan un desgaste físico y muchas veces emocional, siendo un sacrificio para un gran número de mujeres quienes además, suelen estar a cargo de un trabajo y de sus hijos, “hay que ser constante, entrenar y obviamente, la psicología está muy involucrada” agrega la jugadora.
No solo es recreación
El tema recreativo es muy relevante, sin embargo no se puede ignorar que la práctica de los deportes es esencial para la salud de una persona, ya que Ancalao afirma que “hay menos riesgos de contraer enfermedades, ayuda a trabajar en equipo y fortalecerse como persona, además desarrolla muchas capacidades en el cuerpo”, cerró.
A pesar de que aún hay mucho por hacer y queda esperar un mayor compromiso por parte de las autoridades locales para apoyar el deporte femenino, el cual aún está por debajo del masculino, los avances sociales son cada vez más esperanzadores. Al mismo tiempo, faltan los frutos de la nueva ley que ha traído expectación a todo un rubro de deportistas y aficionadas en el país.
