El próximo 8 de marzo conmemoramos un nuevo Día Internacional de la Mujer, una fecha que no sólo nos recuerda el incendio que hace 167 años costara la vida de 146 trabajadoras de Nueva York, sino que nos vuelca la mirada en reconocer los avances, pero también en los desafíos aún pendientes para acortar las brechas y avanzar en mayor igualdad entre hombres y mujeres, construyendo una sociedad más justa.
En los dos primeros años de Gobierno hemos avanzado en temas importantes para las mujeres, como la instalación del sistema para el pago efectivo de pensiones de alimentos, que permite abordar un problema que históricamente ha afectado a muchas madres y cuidadoras. También desarrollamos un intenso trabajo legislativo para contar con mejores políticas para las mujeres, como las leyes de Conciliación, de 40 horas, de protección y reparación para víctimas de femicidio, entre otras.
Tampoco podemos desconocer avances significativos en materia de visibilización y tipificación de la violencia, y en particular respecto a la penalización del delito de femicidio gracias a la Ley Gabriela que rige desde 2020; sin embargo, aún hace falta un marco legal que reconozca la violencia de género que se ejerce en espacios distintos al ámbito de las relaciones afectivas y/o familiares.
Es por eso que este 2024 desde el Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género, y de la mano de nuestra campaña comunicacional para erradicar la violencia de género #LleguemosACero, la prioridad está puesta en la aprobación del Proyecto de Ley para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género, que lleva más de seis años de tramitación en el Congreso.
Se trata de un proyecto que busca generar una ley marco en materia de violencias contra las mujeres, el que entre otros aspectos, permitirá: precisar, de acuerdo a los estándares internacionales, algunas de las definiciones sobre los tipos de violencia y su expresión; incorporar a niñas, niños y adolescentes como víctimas directas de la violencia de género que viven sus madres o cuidadoras; y realzar el rol preventivo de los órganos del Estado para erradicar la violencia contra las mujeres de manera efectiva.
Sabemos que erradicar la violencia contra las mujeres en razón de su género requiere cambios culturales profundos, pero sin duda que esta ley contribuirá a este cambio, estableciendo las bases, los mandatos institucionales y los lineamientos para abordarlas. En la antesala de este segundo 8M del Gobierno del Presidente Gabriel Boric, y junto al trabajo de nuestro servicio asociado SernamEG, continuaremos avanzando por dejar una sociedad más justa para las mujeres, porque cuando una mujer recibe los recursos necesarios para la mantención de sus hijos, hay una familia que no se empobrece a causa de esta deuda; o cuando un hombre o mujer tienen la opción de conciliar su vida laboral y personal, beneficiamos también a sus familias; y cuando defendemos los derechos de las mujeres a vivir una vida libre de violencia, formamos una sociedad más segura para todas y todos.
Por Constanza Sánchez Carvajal. Seremi de la Mujer y la Equidad de Género de Ñuble.